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Color grading vs. corrección de color: ¿cuándo usar cada uno?

  • Foto del escritor: Alexandra Ramírez
    Alexandra Ramírez
  • 27 mar
  • 2 Min. de lectura

color grading corrección de color

En el mundo de la edición de fotos o video seguro te has topado con dos términos que parecen primos lejanos: correción de color y color grading. Y si alguna vez te preguntaste cuál es la diferencia en este artículo te lo explicaré bastante fácil.


Imagina que el proceso es similar al de salir a la calle. Primero te arreglas, te lavas la cara, te peinas, te pones ropa limpia… eso sería la corrección de color. Pero luego, decides qué estilo quieres llevar: ¿un look casual?, ¿algo más elegante?, ¿vas por un aire más misterioso?. Eso es el color grading. ¿Ves por dónde va la cosa?


Paso 1: La corrección de color

Lo primero es lo primero: antes de ponerte creativo con los colores, necesitas asegurarte de que todo en tu foto o video se vea bien. Aquí es donde entra la corrección de color.


Esta parte es 100% técnica y consiste en ajustar cosas como:

  • Exposición: para que no se vea ni demasiado oscuro ni quemado.

  • Balance de blancos: para que los colores sean realistas y la piel no parezca de otro planeta.

  • Contraste y saturación básicos: con esto evitas que todo se vea plano y aburrido.


En pocas palabras, con la corrección de color te aseguras de que el video se vea como debería verse en la realidad. Nada artístico todavía, solo arreglar lo que haga falta.


Paso 2: color grading

Ahora que todo está en orden, es hora de divertirse. Y aquí es donde entra el gran protagonista: el color grading.


Si la corrección de color es asegurarte de que todo se vea bien, el color grading es decidir cómo quieres que se sienta la imagen. Este proceso te permite:

  • Darle un estilo único, bien sea oscuro y dramático, cálido y acogedor, futurista y frío, etc.

  • Crear una atmósfera cinematográfica, esto sería uno de los puntos más importantes, ya que es lo que hace que una película se vea como una película.

  • Resaltar emociones y guiar la experiencia visual


Vamos por un ejemplo, piensa en una escena de terror: seguramente tiene tonos fríos, oscuros y desaturados. ¿Y una película romántica al atardecer? Cálida, con naranjas y dorados. Todo eso que sientes a nivel visual es gracias al color grading.


¿Cuándo usar cada uno?

La regla de oro sería: nunca hagas color grading sin antes haber corregido el color. ¿Por qué? Porque si aplicas efectos y estilos sobre un video mal expuesto o con colores desajustados, solo estarás empeorando el desastre.


Piensa que es como pintar una pared: primero necesitas alisarla y quitarle imperfecciones (corrección de color) y luego decides el color que le vas a dar (color grading).


 
 
 

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